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Recaban firmas contra minas e hidroeléctricas Puebla.- A pesar de que el titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Juan Rafael Elvira Quesada, declaró el jueves pasado que no se había concedido el permiso de exploración a la empresa Frisco para la eventual explotación de una mina a cielo abierto en Tetela de Ocampo, los pueblos de la Sierra Norte no bajan la guardia: al contrario, intensifican su red vinculación e información para oponerse a los llamados “proyectos de muerte”. Tan sólo este fin de semana se efectuaron simultáneamente cuatro foros informativos y de deliberación en sendos municipios de la región: Zacapoaxtla, Tepetzintla, Zapotitlán de Méndez y Huitzilan de Serdán. Según el reporte que se envió a esta casa editorial, en Tepetzintla, el pasado sábado 6 de octubre, el Consejo Tiyat Tlali por la Defensa del Territorio organizó una asamblea informativa a la que asistieron más de 250 personas oriundas de las 14 comunidades nahuas y totonacas de este municipio. El foro concluyó con un pronunciamiento en contra de la minería extractiva y tóxica “que atrae enfermedades, contaminación y escasez de agua para las comunidades, por lo tanto se solicita no se otorgue el uso de suelo a ningún proyecto minero en territorio del municipio y la Sierra Norte de Puebla”. Respecto a los proyectos hidroeléctricos, los asistentes manifestaron que “la tierra y el agua no se venden, se defienden, no vendemos nuestras tierras”. Acerca de las Ciudades Rurales o Centros Integradores de Servicios “se sostiene el derecho de vivir de acuerdo a las formas culturales campesinas e indígenas”. Y, finalmente, “se defiende el maíz nativo como semilla de vida saludable en busca de la soberanía alimentaria”. La asamblea se unió al pronunciamiento del presidente municipal en el cual se manifestó “que no aprobará ninguna Ciudad Rural”. “Reivindicamos el derecho a la autodeterminación de los pueblos, al derecho de la consulta de los proyectos que nos afectan como sujetos de derecho, el derecho a la resolución de nuestros conflictos internos de acuerdo a los sistemas normativos de nuestras comunidades”, concluyeron. El mismo sábado 6 de octubre, organizaciones del municipio de Zapotitlán de Méndez respaldadas por el Consejo Tiyat Tlali, realizaron la primera Asamblea Comunitaria con el objetivo de informar, acordar y decidir sobre el proyecto hidroeléctrico San Antonio, de la empresa Ingdeshidro S.A. de C.V. El proyecto incluye los ríos Zempoala y Ateno, dentro de los municipios de Xochitlán, Zapotitlán, Nauzontla, Atlequizayan y Zoquiapan. Las campanas de la parroquia comenzaron a repicar desde media hora antes, anunciando el acto. Los organizadores mencionaron que esta asamblea respondió a que la empresa mencionada ha iniciado el proceso ante la Semarnat para la aprobación del Manifiesto de Impacto Ambiental, sin embargo, no ha habido consulta ni información de ningún tipo por parte de la empresa a los habitantes de los municipios involucrados, siendo que es un requisito fundamental para aprobar cualquier tipo de proyecto de esta índole. Semarnat argumenta en su oficio S.G.P.A./D.G.I.R.A./D.G./7989 con fecha 3 de octubre, que la empresa publicó un extracto del proyecto en el diario El Sol de Puebla, siendo que en los municipios involucrados no llega ningún periódico nacional o del estado. Asimismo, los pobladores expresaron su preocupación ante el proyecto porque el miércoles 3 de octubre la empresa estuvo en la comunidad de San Antonio para comprar terrenos. Allí, los pobladores cuestionaron la presencia de la empresa y le exigieron retirarse de sus predios, luego contactaron a otras comunidades implicadas en el proyecto hidroeléctrico para pedir su apoyo en la solución y toma de decisiones. Durante esta visita los habitantes de San Antonio invitaron al personal de Ingdeshidro a exponer públicamente su proyecto en la Asamblea Comunitaria en Zapotitlán de Méndez el día 6 de octubre, pero no llegaron. A esta asamblea asistieron alrededor de mil personas de la cabecera municipal y pueblos vecinos. Se recalcó que este movimiento es pacífico, laico, apartidista, establecido en el marco de la ley, que no busca la confrontación con las autoridades sino el trabajo conjunto en pro de los habitantes de estas tierras. Las opiniones de los asistentes se dejaron escuchar en náhuatl, totonaco y castellano: “debemos formar un frente común entre todos para defender nuestro patrimonio, debemos organizarnos para conservar los recursos y rasgos culturales” comentó Álvaro Molina, director de la escuela primaria “Juan Nepomuceno Méndez” de Zapotitlán. “Nosotros debemos defender lo que dejaron nuestros abuelos para nuestros hijos”. “¿Quién va a decidir sobre nuestras tierras?” “¿Para qué usarán la energía eléctrica que saquen de aquí?” Más de 700 firmas ciudadanas fueron recolectadas apoyando la siguiente declaración: “Los habitantes de Zapotitlán de Méndez, Puebla, nos oponemos de manera consciente, libre e informada a la instalación de proyectos mineros a cielo abierto así como hidroeléctricos en la cuenca del río Zempoala”. En Huitzilan de Serdán, Alfonso Aco convocó a una asamblea informativa que tuvo alrededor de 400 personas del municipio. Se compartieron distintas experiencias de Puebla y otros estados. Algunos ponentes fueron Germán Romero de la asociación civil Tetela Hacia el Futuro, representantes de la organización La Vida, que detuvo el proyecto de la mina en Caballo Blanco, Veracruz; María Luisa Albores, de la Cooperativa Tosepan Titataniske y Raymundo García, compartieron información sobre proyectos mineros e hidroeléctricas que afectan la Sierra Norte y Nororiental de Puebla. La población mostró gran interés por este acto que busca replicar la información para que toda la sierra esté enterada de las implicaciones que traen estos proyectos. (Periódico La Jornada).
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